Luneros
Hermano, la línea de tus manos parece un arroyo.
Ahí duermen seres sin nombre, vivos, de antigua prosapia
Es de sílice y clorofila, late, vibra, tirita de siglos y
siglos empujando el ciclo, el bucle cósmico el aura el eterno retorno.
Tu pelo también , tus huesos, tu espinazo, el iris, la
humedad, tu rodilla.
Cierta galaxia micro. Vastedad de tiempo en el espacio
del mismo arroyo.
Ciertos pececillos flotan en una curva de arena y piedra,
dorados, transparentes.
La línea de tus manos es Nazca, el pulmón, la dentadura,
la huella digital del vino y sus ademanes.
Ciertas ideas que salen de tu boca, ciertos lunes
Pececillos disparados en fotones, un océano dentro de
otro, y otro más.
Tus manos, parecen un arroyo.